Rather than love, than money, than faith, than fame, than fairness... give me TRUTH.


30 de diciembre de 2010

I wanna explain to Noah how exhausted i am, even in my dreams. How i wake up tired, how i been drown by some kind of black wave, but i can't write and he doesn't wanna know anyway.

28 de diciembre de 2010

20 de diciembre de 2010

When it's all said and done

Tearing in your mind
How the pain makes you blind
And when it's all said and done
Tearing in my heart
A mistake from the start...

18 de diciembre de 2010


When I thought I knew you..
thinking, that you were true
I guess I, I couldn't trust.

17 de diciembre de 2010

Estoy rodeada de cosas que me ponen triste y me dan mal humor, pero no estoy para nada dispuesta a que esas cosas me caguen el verano. Así que haré lo posible por remediarlas u olvidarlas según el caso y me tiraré a tomar sol (en sentido figurado porque odio el sol).

15 de diciembre de 2010

Esta velocidad
envía miles de
formas hacia el azul
techo redondo en flor

Mientras en otro lado
hay gente
muriéndose
en manos de otros

Y por que habrá
autodestrucción
en la humanidad?
que estupidez!


y por qué? y por qué?

no podes ver mas allá
de tu gravedad,
no encontrás a tu Dios
y dentro tuyo estará?

Porque sos
lo único que puede salvarme,
te cuidaré, te cuidaré

LLévame a la mente
universal, universal,
aliméntame! aliméntame!
Aunque te abraces a la luna
aunque te acuestes con el sol.
No hay más estrellas que las que dejes brillar
tendrá el cielo tu color
no estés solo en esta lluvia
no te entregues por favor!
Si debes ser fuerte en estos tiempos
para resistir la decepción
y quedar abierto, mente y alma,
yo estoy con vos.
Si te hace falta quien te trate con amor
si no tenés a quien brindar tu corazón
si todo vuelve cuando más lo precisás
nos veremos otra vez.
No estés sola en esta lluvia
no te entregues por favor.
Si debes ser fuerte en estos tiempos
para resistir la decepción
y quedar abierto, mente y alma,
yo estoy con vos.
Si te hace falta quien te trate con amor
si no tenés a quien brindar tu corazón
si todo vuelve cuando más lo precisás
nos veremos otra vez.

13 de diciembre de 2010

Yo creo que en esta vida si uno no esta convencido de que puede cambiar el mundo lo único que le queda es el suicidio. Voy a empezar por mí y luego por tí. De a poco vamos a poder cambiarlo.

12 de diciembre de 2010

SABÉS QUÉ? hay algo de mi con lo que lucho desde que me conozco y es la envidia que tengo por los demás. ESTOY CANSADA de eso, BASTA. Es insoportable, es como si quieciera ser todas las personalidades que existen al mismo tiempo. No se puede ser TODO cecilia. No podés ser cantante profesional, psicóloga reconocida, cocinera, bailarina, escritora, actriz, fotógrafa, conductora de radio, profesora de historia, de sociología, de filosofía, licenciada en letras, periodista, editora...no podés estudiar TODAS LAS CARRERAS , no podes saber tocar la guitarra, el arpa, el charango, el chelo, el violín, la armonica, el piano, la batería, el bongó, la trompeta, el saxo, la flauta y el clarinete. No podés ser trapecista de tiempo completo ( teniendo en cuenta todo lo otro). No podés querer hacer el cbc, estudiar canto, aprender fotografía, seguir el curso de cine, seguir trapecio, trabajar, escribir, seguir guitarra, empezar piano y estudiar inglés. En un año no podés, entendelo. Ni en una vida podés.
No podés saber la historia y discografía de TODAS las bandas, no podés volverte loca por eso. No podés escuchar todo, no te pueden gustar TANTAS BANDAS. No podés ver TODAS LAS PELÍCULAS. No te pueden gustar tantas películas.
No podés viajar a todos los países. No te podés aprender TODOS LOS IDIOMAS.
No podés tener TODOS LOS CDs. NO PODÉS.
No te hace bien querer ser tan abarcativa. Es por eso que siento envidia. Cuando alguien canta bien yo quiero cantar bien. Cuando alguien toca el piano, yo quiero tocar el piano. Cuando alguien se dedica a la fotografía, yo quiero dedicarme a la fotografía. Si solo me apasionara una cosa y pudiese ponerle toda mi energía a eso... pero me apasionan tantas cosas que termino repartiendo mi energía entre todas ellas y no rindo en NINGUNA.

9 de diciembre de 2010

VIII
Aprendí bien pronto a conocer mejor esta flor. Siempre había habido en el planeta del principito flores muy simples adornadas con una sola fila de pétalos que apenas ocupaban sitio y a nadie molestaban. Aparecían entre la hierba una mañana y por la tarde se extinguían. Pero aquella había germinado un día de una semilla llegada de quién sabe dónde, y el principito había vigilado cuidadosamente desde el primer día aquella ramita tan diferente de las que él conocía. Podía ser una nueva especie de Baobab. Pero el arbusto cesó pronto de crecer y comenzó a echar su flor. El principito observó el crecimiento de un enorme capullo y tenía le convencimiento de que habría de salir de allí una aparición milagrosa; pero la flor no acababa de preparar su belleza al abrigo de su envoltura verde. Elegía con cuidado sus colores, se vestía lentamente y se ajustaba uno a uno sus pétalos. No quería salir ya ajada como las amapolas; quería aparecer en todo el esplendor de su belleza. ¡Ah, era muy coqueta
aquella flor! Su misteriosa preparación duraba días y días. Hasta que una mañana, precisamente al salir el sol se mostró espléndida.
La flor, que había trabajado con tanta precisión, dijo bostezando:
—¡Ah, perdóname… apenas acabo de despertarme… estoy toda despeinada…!
El principito no pudo contener su admiración:
—¡Qué hermosa eres!
—¿Verdad? —respondió dulcemente la flor—. He nacido al mismo tiempo que el sol. El principito adivinó exactamente que ella no era muy modesta ciertamente, pero ¡era tan conmovedora!
—Me parece que ya es hora de desayunar — añadió la flor —; si tuvieras la bondad de pensar un poco en mí...
Y el principito, muy confuso, habiendo ido a buscar una regadera la roció abundantemente con agua fresca.
Y así, ella lo había atormentado con su vanidad un poco sombría. Un día, por ejemplo, hablando de sus cuatro espinas, dijo al principito:
—¡Ya pueden venir los tigres, con sus garras!
—No hay tigres en mi planeta —observó el principito— y, además, los tigres no comen hierba.
—Yo nos soy una hierba —respondió dulcemente la flor.
—Perdóname...
—No temo a los tigres, pero tengo miedo a las corrientes de aire. ¿No tendrás un biombo?
"Miedo a las corrientes de aire no es una suerte para una planta —pensó el principito—. Esta flor es demasiado complicada…"
—Por la noche me cubrirás con un fanal… hace mucho frío en tu tierra. No se está muy a gusto; allá de donde yo vengo…
La flor se interrumpió; había llegado allí en forma de semilla y no era posible que conociera otros mundos. Humillada por haberse dejado sorprender inventando una mentira tan ingenua, tosió dos o tres veces para atraerse la simpatía del principito.
—¿Y el biombo?
—Iba a buscarlo, pero como no dejabas de hablarme…Insistió en su tos para darle al menos remordimientos.
De esta manera el principito, a pesar de la buena voluntad de su amor, había llegado a dudar de ella. Había tomado en serio palabras sin importancia y se sentía desgraciado.
"Yo no debía hacerle caso —me confesó un día el principito— nunca hay que hacer caso a las flores, basta con mirarlas y olerlas. Mi flor embalsamaba el planeta, pero yo no sabía gozar con eso…
Aquella historia de garra y tigres que tanto me molestó, hubiera debido enternecerme".
Y me contó todavía:
“¡No supe comprender nada entonces! Debí juzgarla por sus actos y no por sus palabras. ¡La flor perfumaba e iluminaba mi vida y jamás debí huir de allí! ¡No supe adivinar la ternura que ocultaban sus pobres astucias! ¡Son tan contradictorias las flores! Pero yo era demasiado joven para saber amarla".
IX
Creo que el principito aprovechó la migración de una bandada de pájaros silvestres para su evasión. La mañana de la partida, puso en orden el planeta. Deshollinó cuidadosamente sus volcanes en actividad, de los cuales poseía dos, que le eran muy útiles para calentar el desayuno todas las mañanas. Tenía, además, un volcán extinguido. Deshollinó también el volcán extinguido, pues, como él decía, nunca se sabe lo que puede ocurrir. Si los volcanes están bien deshollinados, arden sus erupciones, lenta y regularmente. Las erupciones volcánicas son como el fuego de nuestras chimeneas. Es evidente que en nuestra Tierra no hay posibilidad de deshollinar los volcanes; los hombres somos demasiado pequeños. Por eso nos dan tantos disgustos.
El principito arrancó también con un poco de melancolía los últimos brotes de baobabs. Creía que no iba a volver nunca. Pero todos aquellos trabajos le parecieron aquella mañana extremadamente dulces. Y cuando regó por última vez la flor y se dispuso a ponerla al abrigo del fanal, sintió ganas de llorar.
—Adiós —le dijo a la flor. Esta no respondió.
—Adiós —repitió el principito.
La flor tosió, pero no porque estuviera resfriada.
—He sido una tonta —le dijo al fin la flor—. Perdóname. Procura ser feliz.
Se sorprendió por la ausencia de reproches y quedó desconcertado, con el fanal en el aire, no comprendiendo esta tranquila mansedumbre.
—Sí, yo te quiero —le dijo la flor—, ha sido culpa mía que tú no lo sepas; pero eso no tiene importancia. Y tú has sido tan tonto como yo. Trata de ser feliz. . . Y suelta de una vez ese fanal; ya no lo quiero.
—Pero el viento...
—No estoy tan resfriada como para... El aire fresco de la noche me hará bien. Soy una flor.
—Y los animales...
—Será necesario que soporte dos o tres orugas, si quiero conocer las mariposas; creo que son muy hermosas. Si no ¿quién vendrá a visitarme? Tú estarás muy lejos. En cuanto a las fieras, no las temo: yo tengo mis garras.
Y le mostraba ingenuamente sus cuatro espinas. Luego añadió:
—Y no prolongues más tu despedida. Puesto que has decidido partir, vete de una vez.
La flor no quería que la viese llorar: era tan orgullosa...

7 de diciembre de 2010


Bye